Veinte claves

Días de recogerse, estar bajito, permitirte sentir, mirar pa dentro. Estas semanas (como regalo, qué bonito) han llegado nuevos miembros a esta pequeña comunidad sin ruido (de gente sensible, como tan bien dijo Matoses) así que he pensado que por qué no hacer algo diferente a lo habitual —lo habitual es un reporte con unas pocas pinceladas a través del conocimiento, la curiosidad y el amor por las cosas bien hechas. A veces también hay charlas. Hoy, por qué no (y dado que me habéis comentado que más de un confinamiento inesperado) he pensado que estaría bien estirar la obra.