Valentía
A Toni Segarra le pregunté si podía conducir la presentación de Vivir sin miedo en Barcelona un viernes siete de marzo, era para el jueves siguiente, me respondió un par de horas después (¿qué andaría haciendo?) con un sí sin matices. “Claro, Terrés. Cuenta conmigo”. El libro le llega el martes once, con tan solo dos días para para prepararse la charla, me avergüenza esta encerrona pero responde con humor, con ese tipo de temple que tan solo da la experiencia cuando viaja acompañada de sensibilidad: “No me va a dar tiempo a leerme el libro. Igual esa es la gracia”. Sonrío (cómo no hacerlo), lo acompaña con una petición cargada de ternura: “Y me iré volando. Ha llegado mi niña de Los Ángeles, que es un sitio que está empecinadamente lejos, y me quiere dar muchos besos”. Se lo cuento a Laura (también lo admira) y le digo: “Qué valiente, ¿no?” pero ella piensa otra cosa: “No, no es valiente, es inteligente, sabio, sabe navegar la incertidumbre, te quiere. Pero no es valiente porque no le…

