Solo hay una historia que importa
Fue una mañana extraña. Llovía sobre Neguri, todavía no había amanecido pero salí igualmente a la terraza, piedra, madera y forja sobre el acantilado de la bahía de Abra. Llovía sin coraje, marzo sonreía, el Atlántico huele diferente. Neguri es ese pequeño barrio burgués de Getxo que en euskera vendría a traducirse como “ciudad de invierno”. Como la vida es una serendipia infinita vuelvo a un texto de Paul Auster, tengo ese libro descargado en el Kindle: Diario de invierno, es que me arrebata su comienzo: “Piensas que nunca te va a pasar, imposible que te suceda a ti, que eres la única persona del mundo a quien jamás ocurrirán esas cosas, y entonces, una por una, empiezan a pasarte todas, igual que le suceden a cualquier otro”. Dicen, en el mundo editorial, que las primeras líneas son fundamentales, yo tengo mis dudas, pero qué sabré yo. Aldo García, de la librería Antonio Machado, me comentó que tan solo son necesarias un par de frases para intuir si sí o si no. ¿Con las personas es …

